En pocas palabras:
Cada día se suben a las tiendas digitales hasta 100.000 canciones. ¿Cómo es posible? A través de distribuidores de música digital, es decir, empresas que entregan la música de artistas, tanto consagrados como amateurs, a tiendas de descargas y servicios de streaming como Spotify, Beatport o Deezer. En la inmensa mayoría de las tiendas, no es posible subir la música uno mismo, sino que hay que encargar a las discográficas/distribuidoras que la entreguen. Estos distribuidores de música, también conocidos como distribuidores, te pagan tus ingresos por las descargas o streams que hayas generado en las tiendas.
¿Se puede ser más preciso?
Como artista, la distribución digital de música se ha convertido en algo esencial para llegar a todos tus fans potenciales. La distribución lleva su música al mayor número de tiendas y al mayor número de personas posible. La distribución también garantiza que su música se monetice correctamente. Una vez que su música está en línea, la gente puede escucharla, descargarla y comprarla. A cambio, usted recibe royalties (sus ingresos) en función de cómo y dónde se escuche su música. Los distribuidores de música tienen acuerdos diferentes: con algunos pagas una cuota anual, con otros hay modelos de tarifa plana, mientras que otros se llevan un porcentaje de tus ingresos. Merece la pena mirar con atención y comparar para encontrar el mejor distribuidor para usted. Aquí puedes informarte sobre las ventajas de recordJet.
¿Qué diferencia hay entre un distribuidor musical y una discográfica?
Una discográfica y una distribuidora musical son empresas completamente distintas con tareas y objetivos diferentes. El objetivo de un sello es promocionar la música de los artistas y darla a conocer a través de las redes. Las tareas de un sello son mucho más amplias y específicas que las de un distribuidor musical, por eso no son fácilmente accesibles para todos los artistas. Mientras que un distribuidor musical suele estar abierto a todo el mundo, independientemente del género de su música o de su nivel de reconocimiento, los sellos sólo trabajan con artistas seleccionados. Puedes firmar un contrato con una discográfica y que tu música sea distribuida al mismo tiempo por un distribuidor musical. Pueden, pero no tienen por qué, trabajar juntos. El objetivo de un distribuidor musical no es la promoción, sino principalmente la distribución de tu lanzamiento en las tiendas y la gestión de tus ingresos.